¿Es posible llegar al orgasmo a través de la música?

música chica

¿Es posible llegar al orgasmo a través de la música? Recientes estudios afirman que sí, aunque puede que esto no tenga ningún misterio para quienes ya han experimentado alguna vez el conocido como escalofrío musical u orgasmo de la piel, una sensación para la que todos estamos preparados, pero que cada uno siente con diferente intensidad.

Las claves del escalofrío musical

Los franceses conocen esta sensación como 'frisson', que puede ser traducido como escalofrío estético. La sensación producida es la de un espasmo que recorre toda la columna, pone la piel de gallina y crea una sensación de vértigo que transporta al oyente a un universo de placer físico y sensorial.

Lejos de ser un mito, el orgasmo musical es algo cotidiano, aunque requiere de una inmersión en la música prácticamente total. Es decir, no es posible alcanzarlo mientras se escucha música al correr o cuando se va conduciendo con la radio puesta.

La experiencia exige intimidad y recogimiento, y es que el escalofrío es el resultado físico de un proceso mental que exalta al cerebro a través de la música. Es más, recientes estudios han comprobado que la personalidad del oyente también influye. Los más propensos a disfrutar de este arrebato de placer son aquellos que tienen una mente creativa, los que muestran capacidades de sinestesia y, en efecto, los que son capaces de vivir la música de una forma intensa y especial.

Para muchos, la sensación es similar a la que se obtiene al recibir una gran noticia o a la emoción de haber ganado un premio en un juego de casino de repente o en la lotería, dos situaciones que alteran la actividad neuronal de forma muy importante.

¿Cualquier canción sirve para provocar el orgasmo?

No. Esto no significa que haya que acogerse a un género concreto, ya que no existen restricciones en este sentido. Es decir, las personas pueden llegar al orgasmo musical a través del rock, la música clásica o el reggae.

Ahora bien, las composiciones que mayores sensaciones provocan son las que cuentan con elementos inesperados o disonancias que contradicen a la melodía principal.

Para entender mejor esto hay que tener en cuenta que el cerebro suele predecir los acontecimientos a partir de la información que recibe, algo que también hace con las canciones. Así, cuando los acordes sorprenden al órgano de pensar, este responde con sorprenda creando una sensación psicofísica que puede llegar a ser tan intensa como placentera.

La música siempre ha sido una fuente de placer inagotable, más ahora que sabemos que también puede ofrecer sensaciones físicas tan intensas como el orgasmo de la piel.