Suecia y la escuela inagotable
Karmakanic - 'In a Perfect World' (25 julio 2011)
Sello: Inside Out; País: Suecia; Calificación: 8,5
1. 1969 (14:14)
2. Turn It Up (6:55)
3. The World Is Caving In (9:00)
4. Can't Take It With You (5:44)
5. There's Nothing Wrong With The World (7:23)
6. Bite The Grit (4:59)
7. When Fear Came To Town (9:55)
Duración total: 58'10''
Músicos:
- Jonas Reingold: Bajo
- Marcus Liliequist: Batería
- Göran Edman: Voz
- Lalle Larsson: Teclados
- Nils Erikson: Teclados y coros
- Krister Jonsson: Guitarra
Género: Rock progresivo, metal progresivo.
Grabado en 2011.
Producido por Jonas Reingold.
Poco a poco, Jonas Reingold está consiguiendo que Karmakanic deje de ser conocida como 'la otra banda del bajista de The Flower Kings', para convertirse por derecho propio en toda una entidad progresiva propia. Practicando un cada vez más desenfadado y reconocible rock progresivo, con tintes de todas las épocas y estilos, que los acabará por convertir en referencia inexcusable del catálogo escandinavo y, por ende, europeo. Si es que no lo eran ya, pues sus otras tres obras anteriores no dejaban de ser destacables trabajos, aunque en exceso deudoras de otras reconocibles influencias.
'In A Perfect World' es un trabajo mucho más maduro. Y lo demuestran desde el inicio con '1969', extensa, sinfónica, rockera, psicodélica, épica. Casi un cuarto de hora de delirio progresivo como homenaje a un año en el que cambió el mundo, tanto a nivel musical como sociocultural. El 68 dictó la teoría, pero Karmakanic tributan en '1969' al año en que se pusieron en práctica aquellos pensamientos e idearios revolucionarios que ya todos conocemos, sin olvidarse también de su música.
'Turn It Up' es una genial mezcla de pop y sinfónico. ¿Os imagináis que alguien se atreviera a meter en una coktelera a The Beatles y a Yes?, pues aquí lo encontraremos de una manera fresca y dinámica, que si bien comienza con unas desconcertantes percusiones, acaba descubriendo un estribillo pegadizo y festivo, acompañado de guitarras y teclados muy atmosféricos y rimbombantes. No es novedoso, pero tampoco habitual, así que se agradece un recuerdo a un estilo que desde los Genesis más mainstream nadie había sabido plasmar tan bien. Como bien se encarga el propio Reingold de explicar, la diferencia entre Karmakanic y el resto de bandas en las que figura o colabora es que esta es la única que le da autoridad y libertad para expresarse plenamente, sin tener que ceñirse a un estilo único y concreto. Así, puede experimentar y trabajar con sonoridades dispares, como ocurre con 'The World Is Caving In', profundo y sentido medio tiempo con patrón baladístico, cargado de sinfonía y dominado por un maravilloso piano y teclados, en contraposición a sus partes más guitarreras, que lo acercan al neoprogresivo norteamericano. Mención especial merece, no solo aquí sino en todo el álbum, un carismático Göran Edman al que no vamos a descubrir ahora en sus habilidades vocales.
Para mi, la joya y lo novedoso, llega con 'Can't Take It with You'. Un inicio e hilo conductor a base de ritmo latino y salsa, sobre el que poco a poco se van construyendo partes más metaleras, incesantes cambios de ritmo, con guitarras acústicas, piano, jazz y riffs de corte casi industrial se aúnan en un conglomerado sónico perfecto, donde incluso algún que otro gutural tiene cabida. Te dejará tan anonadado como emocionado. Según declaraciones del propio Reingold, este tema nace del aburrimiento de hacer siempre más o menos lo mismo, y de la necesidad de escapar de lo que considera encorsetadas restricciones compositivas dentro del progresivo clásico. No queda menos que celebrar su hastío, pues el fruto es un tema sencillamente espectacular y genial.
Por su parte, y tras el shock de 'Can't Take It with You', 'Theres nothing wrong with the world' se torna más ambiental, presentada con un delicado piano y la voz de Edman a un nivel sobresaliente, para poco a poco ir adaptándose al ideario de los Flower Kings más recientes, pudiendo tener cabida perfectamente en cualquiera de sus últimos discos, con guitarras y teclados como protagonistas tras las cuatro cuerdas de un Reingold inspiradísimo. Igualmente inspirador es 'Bite the Grit', extraña mezcla de riffs industriales, free jazz y cierto aroma pop, sobre todo en las estrofas que guía Edman, tan ecléctico que encandila a la primera.
Cerrando el disco, 'When Fear Came to Town', un acústico y emotivo corte, impregnado de las sensaciones que en Reingold produjo un atentado suicida en Suecia, perfectamente plasmadas en la voz de Edman, y que se traducen en una especie de blues-country con un final absolutamente fantástico, en formato de jazz, con toda la banda aportando su granito de arena, pero especialmente el piano de Larsson y la guitarra de Jonsson. Un perfecto final para un disco que si bien no es redondo, sí que me parece más coherente y maduro que sus anteriores obras y que tiene en la variedad su punto fuerte.
Como decía al inicio de la crítica, Karmakanic se han ganado en tan solo cuatro entregas el derecho a ser considerados una realidad a la que empezar a considerar como referente actual del progresivo, lejos ya de su etiqueta de proyecto paralelo a The Flower Kings. Aunque eso es algo que dependerá de vosotros, lectores-oyentes.
Puntuación: 8,5/10
Javi Moreno Vega
Noviembre 2011